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MAS DE LO MISMO, PERO PIDIENDO EL VOTO

Ya imagino, que lo suyo hubiese sido titular el artículo con algo como “Empezó la campaña electoral”, “Apertura de campaña”, o cualquier otra frase relacionada con la fecha señalada en el calendario electoral como apertura de campaña. Realmente la diferencia entre las ventitrés horas y cincuenta y nueve minutos del día 21 y las cero horas del día 22, estriba básicamente en dos liturgias electorales: Se realizan actos públicos de los partidos en los minutos finales del día previo a tan señalada fecha, y además de lo dicho en los últimos nueve meses, ya no es necesario insinuar que se vote a la formación política a la que perteneces, si no que en un ambiente de tensión contenida y con inusitada expectación, muy similar al comienzo de las campanadas de Nochevieja, el interviniente puede decir aquello de: “Vota a …”.

Aún así, en las horas previas al inicio de la campaña hubo en esta ocasión una innovadora y dinámica diferencia. Como si fuese fácil aguantar con los nervios templados ante tan inquietantes instantes previos al banderazo de salida electoral, se libro una brutal batalla ideológica y propositiva, entre unos supuestos pesos pesados del PSOE y del PP. Nada mas y nada menos que un debate a vida o muerte entre Solbes y Pizarro.

Es verdad que ninguno de los dos cuestionó al otro ni el modelo económico, ni productivo, ni laboral, ni impositivo, ni fiscal que cada cual dice tener, y que supongo que exponer esas posibles diferencias debería haber sido el objeto de tan trepidante debate. Pues no es el caso. Coincidencia en la subasta de rebajas de impuestos, ninguna alusión a los problemas comunes de los ciudadanos, ni mención a como abordar el incremento del desempleo y como va afectar la crisis a los diferentes sectores sociales, vaticinios rappelianos de como van a mejorar o empeorar las cosas en función de quien obtenga mas votos. Eso si, mucha cifra de premeditado difícil seguimiento y ninguna propuesta, mas allá de las conocidas, salvo, todo hay que reconocerlo, la ingeniosa iniciativa de Pizarro, de suprimir el Ministerio de Vivienda, el piso del Ministro Fernández Bermejo, o la ilegalización de ANV, como elementos que equilibrarían las rebajas fiscales propuestas por el PP.

Nosotras y nosotros, mas modestamente realizamos también la consabida liturgia electoral, insistiendo en la propuesta, e intentando explicar, que lo que realmente nos jugamos en estas elecciones, es en que sectores sociales va a recaer la desaceleración económica y el desempleo con las similares recetas del PP y el PSOE, y como solamente con una IU fuerte, habrá una reorientación del modelo económico basado y defendido por los dos grandes partidos, en la construcción, los servicios, y el turismo, por otro en el que se potencie la industrialización a través de mayores inversiones en Investigación, Desarrollo e Innovación, que permita mas y mejor empleo, así como las políticas formativas necesarias.

No es razonable, y además nunca forma parte de los discursos del bipartidismo, que España en gasto social este un 27% por debajo de los paises de nuestro entorno, y se siga ofertando bajadas de impuestos, sobre todo en una situación de crisis económica y del modelo productivo, que ni Solbes niega.

Yo en cualquier caso, voy a seguir investigando a que ganó Solbes a Pizarro. Supongo que los medios de comunicación deben referirse a apostura, elegancia, verbo fácil, y demás atributos del continente, porque del contenido los ví mas cerca del honroso empate, que de la victoria de uno u otro.

No pretendo ser quejica, pero no me resisto a mencionarlo. He vuelto a comprobar con profunda emoción, como de las escasas menciones hechas a IU en los medios sobre la apertura de campaña, no se hace prácticamente mención a las propuestas, pero sin embargo los redactores han tenido ocasión una vez más, a manifestar ese puntito literario, mordaz y humorístico, que imagino tienen que ocultar en otras ocasiones, haciendo titulares como “Llamazares vuelve al mundo real”, o recordando muy oportunamente la elaboración de la listas en el Pais Valenciano. Que digo yo que para estas cosas también podían ser bipartidistas.