SEGUIMOS SUMANDO VOLUNTADES PARA CAMBIAR MADRID

Mientras otros siguen ocupados en campañas mediáticas de poco contenido, nosotras y nosotros seguimos insistiendo en la necesidad de sumar voluntades para el cambio social que Madrid necesita. Hoy, con la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos, hemos dado un paso más. Resaltar la sintonía con la Federación no le debería extrañar a nadie, porque el trabajo conjunto entre ambas organizaciones ha sido una constante en la acción política de IU y su Grupo Parlamentario. Es decir, no se trata de la típica “foto-reunión” de precampaña, es el compromiso de nuestra organización con las reivindicaciones de la Federación que hacemos nuestras.

En breve espacio de tiempo firmaremos ese compromiso sobre las propuestas de los representantes de los vecinos y vecinas de esta Comunidad. Hoy avanzábamos además sobre aspectos concretos de la Agenda Social para Madrid, que venimos compartiendo con movimientos sociales, sindicatos y movimiento vecinal. Mientras el Gobierno de Esperanza Aguirre ha ido cercenando derechos y coberturas sociales para beneficiar a las rentas y patrimonios más altos, ademas de eliminar los ámbitos de participación, nosotras y nosotros creemos que hay que recorrer el camino inverso que inició el PP hace demasiados años, al objeto de situar al empleo y los derechos de la mayoría social trabajadora como prioridades de la acción del Gobierno que necesitan los madrileños y madrileñas, y para ello es imprescindible que Esperanza Aguirre abandone la Puerta del Sol el próximo mes de mayo.

En ese sentido hoy planteábamos, dentro de esa Agenda Social para Madrid, crear por Ley un fondo de inversión en infraestructuras y equipamientos para áreas úrbanas que requieren una atención especial, con el objetivo de reequilibrar territorial y socialmente nuestra Comunidad.  Un fondo que permitiría una inversión de 1.000 millones de euros, lo que además supondría la creación de 12.000 empleos. Esa inversión se generaría aplicando el Impuesto de Donaciones y Sucesiones a las 50.000 rentas más altas de la Comunidad, que con Esperanza Aguirre han dejado de cotizar. Para el desarrollo de esta iniciativa, también se crearía una Comisión de Seguimiento y Evaluación, de forma que se garantizasen los proyectos con la participación del movimiento vecinal, en cada una de las actuaciones de las zonas de actuación preferente, desde el comienzo al final de cada iniciativa.

Concluíamos con la necesidad de que la Federación de Asociaciones de Vecinos formaran parte de los órganos de participación actualmente existentes, como el Consejo Económico y Social y del Consorcio Regional de Transportes, así como compartíamos la necesidad de crear de nuevo la Comisión de Urbanismo de la Comunidad, como instrumento de control, planificación y transparencia de los desarrollos urbanísticos de la Región.

En definitiva, seguimos en la propuesta, en la movilización y en la suma de voluntades, para el cambio social y político que necesita Madrid.