EXPLICAR, PROPONER, MOVILIZAR, CONVERGER. HAY OTRA IZQUIERDA POSIBLE

Con la última encuesta del CIS ha vuelto a reproducirse todo el muestrario de valoraciones, que dependiendo quien las haga, siempre tienen una lectura positiva para cada opinante. Cualquier estimación de ascenso o descenso tiene su correspondiente lectura, que indefectiblemente barre para la casa correspondiente, cuando no hay alguien que incluso pone en duda la calidad científica del estudio demoscópico si la ocasión lo merece.

Que IU viene señalando una tendencia al alza desde nuestra última Asamblea Federal es un hecho constatado. Tan constatado como que ese ascenso no tiene la correspondencia que debiera con la pérdida de votos del PSOE, como así señala la valoración que hace El País de la misma.

Que los datos de ésta encuesta no hayan terminado de recoger los efectos de las medidas de recortes sociales del Gobierno, es posiblemente un factor con relevancia. Que no haya sido motivo de valoración suficiente por los encuestados y encuestadas el debate y endurecimiento de la Reforma Laboral, es también un elemento a tener en cuenta. Que los efectos de los recortes, congelación de pensiones, etc, todavía no se perciban con toda su crudeza, es seguro un factor que también tiene su importancia. Que el bipartidismo político y  mediático busca nuestra invisibilización, es algo tan real como sangrante. Pero lo que tengo claro es que nada de todo esto por muy real que sea,  y mucho menos argumentos de “la cocina”, pueden ser los bálsamos con los que justificar el no llegar todavía suficientemente a amplias capas de quienes van a verse directa y fuertemente afectados y afectadas por todas las medidas emprendidas por el Gobierno de Zapatero, y por las que ya llevan sufriendo descarnadamente desde hace años por el Gobierno de Esperanza Aguirre.

Es decir, la mayoría social trabajadora, pensionistas, mujeres, y jóvenes tienen que tener la posibilidad de conocer y comprometerse con la Alternativa Social a la Crisis que exclusivamente defendemos IU en el ámbito político, pero que también compartimos muy ampliamente con los Sindicatos de Clase, CC.OO. y UGT, y con multitud de organizaciones sociales, y personas no afiliadas. Y esto es responsabilidad de todas y todos los militantes de IU. La culpa no la tiene casi nunca el empedrado.

Nadie debería hacer muchas cuentas de la lechera con las encuestas, y nosotras y nosotros menos. Queda una inmensidad hasta las próximas elecciones, pero tenemos la responsabilidad prioritaria de que esa mayoría social trabajadoras vea en IU un instrumento útil para resolver los graves problemas que padecen fruto de las políticas neoliberales que se aplican desde el Gobierno del Estado, y con mayor virulencia desde el de Esperanza Aguirre.

Son muchas personas que votaron al PSOE desde un programa y unas referencias de defensa del Estado del Bienestar, que han sido abandonadas a su suerte, fruto de las políticas neoliberales que el partido en el que depositaron su confianza para pararlas ha terminado por aplicar. Explicar, proponer, movilizar, y converger desde la realidad social existente, con solvencia, flexibilidad y firmeza, deben ser las herramientas con las que ampliar nuestro espacio.

Nosotras y nosotros ni sabemos ni queremos instalarnos en electoralismos sin contenidos. Mientras el PSOE, el PP o UPyD evalúan sus posibilidades electorales desde apasionantes debates sobre la idoneidad de un candidato u otro, desde la inacción más trepidante, o desde la contemplación de la caída del Gobierno que le ha comprado sus recetas neoliberales, IU-CM va a seguir trabajando para ser la solución a los graves problemas que tiene la gente.