NO MAS VIOLENCIA FASCISTA

Este domingo parece haber dado comienzo, una especie de “semana grande” de carcamales nostálgicos, fascistas, neonazis, y descerebrados violentos y peligrosos en general. Y parece ser que para sorpresa de algunos, lo han hecho con el único lenguaje que conocen estas bestias. La violencia y el asesinato.

A mi sinceramente no me salen las palabras para transmitir mi inmenso dolor, solidaridad y cariño a la familia de Carlos. Me gustaría ser capaz de expresar algo a la madre y a la abuela de Carlos, que les permitiese, no ya mitigar un ápice su inifinita desesperación y quebranto porque sería imposible, si no algo que pudiera consolarlas mínimamente, ante la terrible pérdida de un hijo y un nieto de 16 años, de forma tan salvaje por esa inmunda alimaña, y sus autores intelectuales.

Es patética la equidistancia del ínclito Acebes, declarando “la condena de su partido, por la reyerta que se produjo entre miembros  de grupos de ultraderecha y antifascistas, en la que fue asesinado un menor”. Encomiable ejercicio eufemístico del brillante orador Acebes. Con lo bien que desarrolla este hombre, la necesidad de mas investigaciones para seguir buscando autores intelectuales, o lo crítico que también es, con jueces o instituciones que permiten manifestaciones determinadas, por no decir lo “adelantado a su tiempo” que parece  a veces, cuando de forma premonitoria, ya sabe que puede haber disturbios si se autoriza determinada movilización. Condena la reyerta, no el asesinato, y equipara grupos que se movilizan contra Derechos Constitucionales y apelan públicamente en favor de la “legítima violencia” que preconizan, con quienes defienden valores de igualdad, tolerancia y solidaridad, mas allá de grupos muy reducidos y minoritarios, que en ningún caso han protagonizado hechos ni remotamente parecidos al asesinato de Carlos.

Señora Delegada del Gobierno, está usted a tiempo de que en esta semana de exaltación del fascismo, no se reproduzcan situaciones que luego haya que “condenar enérgicamente”. La señora Mestre, no puede decir de forma tan ligera, que el asesinato de Carlos no tiene tintes racistas. El asesino de Carlos, sin ser el inspector Colombo, parece ser que se puede deducir, que se dirigía a la manifestación convocada, por la organización ultraderechista Democracia Nacional, casualmente en el Barrio de Usera, donde hay un alto porcentaje de inmigrantes, contra los que era el objeto de su movilización. Lo digo porque sería conveniente que la Delegada del Gobierno, tuviese en cuenta que estos colectivos fascistas, si no piensas y actúas como ellos, eres  susceptible de ser eliminado, ya seas inmigrante regularizado, sin regularizar, o madrileño de cincuenta generaciones.

Señora Delegada del Gobierno, en defensa de la Democracia, de la Libertad, de la Igualdad, y si quiere, de la Constitución, debe prohibir este tipo de concentraciones y manifestaciones. Salvo para Carlos y su familia, estamos a tiempo.