Ya adelanto que el título de este post no es fruto de ningún intento por mi parte, de emular las reconocidas dotes de “El Mentalista”. Es sólamente que dado que el próximo 3 de Julio se aprobarán con los votos del PP, la primera modificación de los Presupuestos de la Comunidad, (que no quiere decir que sea la última), no sería para menos que dadas sus características, fuera merecedora de formar parte de tan reconocida y poco útil lista de “días internacionales de…”.
Ya he advertido en otras ocasiones de la peligrosidad que entraña para la población, cualquier reunión de dos o mas dirigentes del PP. Si esto además se produce en la Puerta del Sol los jueves por la mañana, en forma de reunión ordinaria del Consejo de Gobierno presidido por Esperanza Aguirre, lo que puede salir de ahí, sitúa a los madrileños y madrileñas en estado de “alarma social” (Def Con Dos).
No conformes con su amplio historial delictivo en matería social, procederán en ese siniestro pleno de la Asamblea, a esquilmar una vez más a la inmensa mayoría de los habitantes de esta Comunidad, bajo el pretexto de los “necesarios” ajustes para conseguir alcanzar los objetivos de déficit, impuestos por los poderes económicos-financieros, dada la caída de ingresos que han sufrido las arcas autonómicas.
Pues claro que han caído los ingresos. Por cierto, una de las pocas verdades que ha sido capaz de manifestar Aguirre en años. Lo que no termina de explicar la Presidenta es los porqués de esa caida. Efectivamente, que estemos en niveles de pobreza de la postguerra, con más de 600.000 desempleados y desempleadas, hace caer los ingresos de la gente, subir la insolvencia económica, descender el consumo, y por lo tanto la recaudación. Lo que se le “olvida” decir a Esperanza Aguirre es que cuando reivindicó para sí misma, el premio a la más lista de la clase en su guerra contra el déficit, el problema estaba también en que al parecer había un “cajón” perdido en algún lugar, de dimensiones siderales supongo, donde se escondían facturas por valor de 2.000 millones de euros.
Pero sobre todo y fundamental, si esta Comunidad dispusiese de los más de 18.500 millones que ha regalado Aguirre a las 300.ooo personas con mayores rentas y patrimonios de Madrid, sencillamente no existiría esta situación. Pero claro, como si hay algo a lo que no está dispuesta es a dejar de mantener los privilegios de los de su “clase”, en vez de retornar al modelo fiscal anterior suyo, el de Gallardón nada menos, poco sospechoso de modelos fiscales izquierdistas, que permitiría recuperar más de 2.000 millones de euros/año, pues vuelve a recortar en sanidad, educación, salarios de empleados públicos, peajes en autovías, nuevas tasas, tarifazos en transporte, y toda suerte de tropelías que empobrecen a los más de 6 milllones de habitantes restantes, que són quienes pagan los privilegios a esa minoría parasitaria del resto.
Pues bien, parece que el Gobierno Regional quiere seguir provocando el conflicto social, haciendo oidos sordos a propuestas como la creación de un impuesto para las entidades financieras, a la eliminación de las exenciones y deducciones al impuesto de sucesiones y donaciones, a la aplicación del impuesto de patrimonio, a la creación de tres nuevos tramos en la parte autonómica del IRPF para las rentas más altas, en definitiva, a la capacidad de recaudar de las mayores rentas y patrimonios, más de 7.000 millones de euros en menos de dos años.
No le va a durar más tiempo seguir echando cortinas de humo para engañar a los madrileños y madrileñas. Los y las jóvenes madrileños y madrileñas especialmente, no van a soportar por más tiempo que se les niegue el futuro, recortando aún más en formación, universidades, becas, políticas de empleo, educación, sanidad, etc…, mientras tienen que asistir al bochorno de una Presidenta, que como toda perspectiva agacha la cabeza ante quienes como los magnates de Eurovegas, quieren convertir esta Comunidad en una especie de república bananera, para supuestamente atraer un turismo de borrachera, prostitución y mafia.
De esto último, seguramente seguiremos hablando.
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