No se si es más o menos aconsejable electoralmente, seguir preocupándose y ocupándose de los problemas reales que tienen las personas todos los días. Le asalta a uno esta duda, cuando comprueba como para los dos grandes partidos las campañas, precampañas, o como cada cual quiera llamarlo, las utilizan para cualquier cosa menos para lo que se supone debería ser el objeto de esos tiempos. Debe ser tremendamente alentador para las mas de 60.000 familias que ya no tienen ningun ingreso ninguno de sus miembros, comprobar como Esperanza Aguirre va desgranando poco a poco las personas que componen su lista, o como Tomás Gómez se rodea de intelectuales que ensalzan su figura.
Mientras tanto y como si no fuera con ellos, los recortes sociales hacen que los grandes culpables de la crisis, es decir los bancos y el poder financiero, se conviertan en los grandes beneficiarios de las medidas del Gobierno de Zapatero y de las de Esperanza Aguirre, a costa del crecimiento del paro, de los desahucios, y de la pérdida de derechos de la mayoría social. Mientras la banca ha ganado 32.000 millones de euros desde que se inició la crisis, mas de 4 millones y medio de trabajadores y trabajadoras están en desempleo, y 100.000 familias han perdido su vivienda a favor de los bancos en el último año.
Ya en el año 2009 llevamos a la Asamblea de Madrid una iniciativa instando al Gobierno de la Nación y al Congreso de los Diputados, a que modificara la Ley Hipotecaria, para que al menos cuando una familia no puede pagar la hipoteca y es desahuciada, la deuda con el banco no siga manteniéndose. Sorprendentemente fue aprobada con el apoyo del PP y la abstención del PSOE. Y digo sorprendentemente porque cuando Gaspar LLamazares llevó la misma iniciativa al Congreso de los Diputados hace pocas semanas, fue rechazada con los votos en contra del PP y del PSOE. Se entiende que la sorpresa es lo que votaron en la Asamblea de Madrid los dos grandes partidos, no lo que han votado en el Congreso de los Diputados.
Pues lamentándo mucho nosotras y nosotros vamos a seguir insistiendo en proponer medidas que acaben con los problemas de las familias sobre-endeudadas, en vez de montar espectaculares “saraos” electorales donde lo que se dice importa menos que lo que se pretende reflejar.
Por eso proponemos modificar la Ley Hipotecaria para permitir la dación de la vivienda en pago al préstamo hipotecario impagado. Impedir a su vez que las entidades financieras que hayan solicitado financiación pública a través del FROB, no puedan embargar a las familias que no pueden pagar su vivienda habitual. Asimismo entendemos que hay que realojar en viviendas protegidas de propiedad de la Comunidad o de los Ayuntamientos en régimen de alquiler, a las familias que hayan sido desalojadas de su vivienda por impago de la hipoteca, cuando carezcan de otros bienes y tengan rentas inferiores a 20.000 euros anuales.
También vamos a seguir impulsando la modificación de la legislación para que se considere como abusiva la “claúsula suelo” de las hipotecas. Proponemos la creación de un Fondo de Ayuda para las familias endeudadas por la hipoteca de su vivienda habitual, contribuyendo al pago de un porcentaje de la cuota hipotecaria, durante un plazo de tiempo determinado que se fije posteriormente por ley, para aquellas familias que han dejado de percibir prestación por desempleo. Ese fondo se financiará por medio de una tasa bancaria a pagar por las entidades financieras con sede social en la Comunidad de Madrid, en función de su cuota de mercado y de las hipotecas concedidas. Ese fondo será gestionado por medio de una Agencia Pública de Financiación Regional de nueva creación.
Por último también vamos a proponer la creación de una Dirección General de Consumidores de Servicios Financieros, dentro de la Consejería de Economía de la Comunidad de Madrid, que deberá ser el organismo competente para poner en marcha toda una serie de medidas anuales de control sobre las entidades financieras, y su aplicación de derechos de los consumidores.
Estas son algunas de las medidas que nos comprometimos con la Asociación de Consumidores de Bancos, Cajas y Seguros, (ADICAE), para incorporar en nuestro programa electoral.
Claro, así no nos queda tiempo para montar esas fiestas tan resultonas que hacen los dos grandes partidos, y a ellos no les queda tiempo para atender los problemas reales que padecen todos los días los susceptibles espectadores sus fiestas. Me parece que fue Marx (Groucho) quien lo dejó perfectamente claro: “Lo que más molesta es que cada uno vaya a lo suyo, menos nosotras y nosotros que vamos a lo nuestro”.
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