EL SÍNDROME DE ESTOCOLMO

   Hay veces que uno no gana para sorpresas, aunque éstas tampoco terminen por sorprender demasiado. Digo esto, porque cuando el lunes pasado fuí a Torrejón, para hacer una rueda de prensa con los compañeros y compañeras de nuestro Grupo Municipal en esa localidad, para presentar la enésima moción de IU, relativa a que se dejara de incumplir la Ley en este Municipio en el empadronamiento de inmigrantes, coincidió con la lectura ante los periodistas por parte del Alcalde de Torrejón, de un comunicado municipal en el que anunciaba el primer edil, que retiraba la xenófoba ordenanza en cuestión. Ni que decir tiene que tanto el portavoz de IU en Torrejón como yo mismo, manifestamos ante los medios de comunicación nuestra alegría y satisfacción, por haber conseguido que Torrejón no fuese un Municipio al margen de la Ley, y señalado en todo el país como un lugar donde se alienta la xenofobia.

La relativa sorpresa a la que hacía mención al comienzo de este artículo, es la que ha dado hoy en portada El País, anunciando que el Gobierno de la Nación tiene intención de introducir en la nueva Ley de Gobierno Local, mecanismos para permitir a los Ayuntamientos denegar el padrón por causa de inhabitabilidad. Eso si, los veinte metros cuadrados por persona que exigía el Ayuntamiento de Torrejón para empradonar, serán “muchos menos”. Es evidente que en ese “muchos menos”, se ve la mano de la sensibilidad social del Presidente Zapatero, así como su obsesión por la claridad en sus medidas y la ausencia de improvisación. Osea, como en demasiadas ocasiones, cuando creíamos que habíamos doblado el pulso a la derecha, el Gobierno le saca la botella de oxígeno.

Sinceramente, me ha dejado mucho mas tranquilo la viñeta de Peridis, por aquello del cierto temor que nos puede dar algunas veces a que nos dibujen interesadamente como ”radicales sectarios inconformistas”, cuando al Presidente del Gobierno le invade la “responsabilidad y los acuerdos de Estado con el PP”. No parece que Peridis sea sospechoso de desafecto ni al PSOE ni al Presidente Zapatero. Resulta lamentable que el Gobierno de la Nación también comparta con el PP  la preocupación por los pisos patera, penalizando aún más si eso es posible, a los inmigrantes que “disfrutan” de una vivienda alquilada a precio de oro a algún filántropo casero, al que seguramente no le dejará vivir el sufrimiento de comprobar la cantidad de gente que tiene que residir en su propiedad para poder pagarle. Y todo este “sinvivir” del PP y del PSOE con los pisos patera, justo cuando el porcentaje de inmigrantes ha descendido  espectacularmente por efecto de la crisis y el desempleo. ¿No se habían dado cuenta hasta ahora, porque a lo mejor ya no contribuyen tan eficazmente a sanear las cuentas del Estado? .

Es evidente que no habrá medidas para quienes especulan y abusan con las necesidades de los más débiles, como no las hubo cuando en la época de las vacas gordas del ladrillo no se generó un parque público de viviendas protegidas en alquiler. Ahora tampoco se hace, porque sencillamente la preocupación por la infravivienda, o los pisos patera ni ha existido ni existe en el PP. Es solo oportunismo y electoralismo carroñero de la derecha, que no tiene complejo alguno para escarbar en la miseria de los mas bajos instintos, si consideran que eso le puede hacer arrancar un puñado de votos de la extrema derecha, y de las conciencias mas egoistas e insolidarias.

El debate artificial auspiciado por la derecha, sobre la cadena perpetua o la modificación de la Ley del Menor, recuperando interesadamente terribles y dolorosos hechos que a cualquier persona dejaron y dejan impactado, pero que en su etapa de Gobierno ni hicieron un gesto por modificar lo que hoy dicen querer cambiar, es una buena muestra de hasta donde están dispuestos a llegar por alcanzar el poder.

El problema Presidente, es que al PP también se le abren la puertas de los gobiernos, cuando en vez de combatir sus valores sólo se intenta matizarlos